El Museu de la Tècnica está ubicado en los Dipòsits Vells de Manresa. La construcción de los depósitos, realizada entre 1861-1865, fue hecha con el fin de dotar la ciudad de una reserva de agua. El edificio cuenta con tres depósitos idénticos e independientes cubiertos por dos vueltas de piedra cada uno, con una superficie de 2.400 m2.